Relato: Venganza azul
Relato para la iniciativa de escritura VadeReto. Junio 2021.
VadeReto es una iniciativa mensual propuesta por Jascnet en su blog Acervo de Letras. Este mes, nos reta a escribir un relato basado en el color AZUL, ya que estamos en el mes del verano.
Yo he decidido continuar con la Saga Venganza 🤠 que comencé en este mismo reto y tiene dos capítulos anteriores, seguro que los recordáis:
Pues aquí va la tercera entrega: Venganza azul, una precuela.
Venganza azul
Un caluroso día despejado de 1880.
Billy llega al pueblo a lomos de su noble caballo Relámpago. Tras rebasar la oficina del sheriff, desmonta en la puerta del Saloon y entra en la edificación de madera. El sonido de la pianola envuelve el lugar. Con la mirada, busca a su amada Susan. Se le revuelven las tripas cuando la ve hablando con Peter, el tuerto. Le detesta profundamente y, para colmo, una vez más lleva bajo su cuello ese odioso pañuelo color azul cielo.
«¿Qué clase de color es ese para un pañuelo?», piensa, asqueado, Billy. Siempre había odiado ese color en todas sus variantes: azul claro, azul oscuro, celeste, azul marino, índigo, azul cobalto... Tenía una fuerte aversión hacia él: Cianofobia, lo llaman.
Cuando los dedos de Peter rozan suavemente la mejilla de Susan, Billy se acerca con ánimos de interrumpir cualquier intención que su enemigo tenga hacia ella.
—Todavía tenemos pendiente esa partida de cartas, Peter —dice Billy, intentando contener su ira. No puede evitar echarle otro vistazo que emana desprecio al condenado pañuelo lapislázuli.
Peter asiente y con su detestable sonrisa le invita a sentarse con él en una mesa. Toca su preciado pañuelo azul de la suerte y baraja las cartas. Susan se acerca y los observa con una risita burlona. Sabe bien que llevan meses compitiendo por ella.
Sin embargo, la partida no dura demasiado. Pronto sucede un altercado: que si ha hecho trampas el uno, que si se ha escondido una carta el otro… Y, finalmente, se retan a un duelo, pero no en ese mismo pueblo, no… Peter insiste en atravesar el desierto y que el desafío tenga lugar en el pueblo abandonado que se encuentra a unas millas de allí.
Ambos se alejan a caballo hasta alcanzar la solitaria villa. Susan les acompaña, ha decidido montar en Relámpago con Billy.
Ya en el pueblo fantasma, Billy y Peter se ponen uno frente al otro en la arenosa calle principal. Susan espera de pie, junto a Relámpago. Acaricia dulcemente la crin del animal.
—¡Solucionemos esto de una vez por todas! —amenaza Peter, con su irritante voz
—Cuanto antes —gruñe Billy.
—Diez pasos y disparamos. Susan, ¿serías tan amable de contar? —le propone el tuerto.
—Sí… está bien... —responde nerviosa y dubitativa. Parece que, en esta ocasión, la cosa va muy enserio.
Una vez acordado el método bajo el inmenso cielo azulado del desierto, los duelistas se dan la espalda y comienzan a caminar, dando un paso a cada número que pronuncia Susan.
Peter agarra su pañuelo añil de la fortuna, el cual rodea su garganta. Todavía quedan unos pocos pasos para girarse.
No obstante… Billy escucha el estruendo de una bala tras él y un intenso dolor se aloja en su riñón.
—¡Todavía no había terminado de contar! —exclama Susan.
Billy se vuelve enseguida, tomando su revólver, una segunda bala le impacta en las costillas. Peter camina hacia él. Mientras Billy trata de mantenerse en pie, levanta torpemente su arma hacia su rival.
Una tercera bala de Peter le alcanza en la mano, obligándole a soltar su revólver, y ya está lo bastante cerca como para propinarle un fuerte empujón que le hace caer hacia atrás. Cuando Billy está tumbado en el suelo, Peter le pisa dolorosamente el torso y le apunta directamente a la cabeza.
—¡No, Peter! —grita Susan.
—Maldito tramposo… —escupe Billy desde el suelo.
—Esto es por lo del ojo, Billy. —Peter guarda su revólver—. Iba a darte una muerte rápida, pero parece que Susan prefiere que perezcas lentamente en este lugar tan desolado —expresa con absoluta frialdad. Levanta el pie y al tiempo que se separa, añade:
—Por cierto, me quedo con tu revólver y con tu caballo, así pagarás tu deuda de juego.
Tras coger el arma del suelo, Peter se acerca Relámpago y toma sus riendas. El caballo relincha y se revuelve para liberarse.
—¡Bastardo! —le grita Billy—. ¡No te debo nada!
Relámpago se resiste a ser arrastrado por Peter.
—Así que no quieres venir conmigo—. Este apunta a la frente del animal.
—¡Detente! —exclama Billy desde el suelo.
Una bala se aloja en el cráneo de Relámpago y cae desplomado en la arena.
Peter monta en su caballo.
—¿Vienes, Susan? —Le tiende su mano.
Ella, aterrada, acepta.
Mientras se distancian, Billy, tumbado bocarriba, siente cómo se le está escapando la vida mientras sus ojos se pierden en el infinito cielo de color azul.
—Volveré a por ti... Peter, el tuerto.
De ese maldito color azul.
FIN
He pensado que esta serie tendrá un total de cinco capítulos, por lo que restan dos, que seguiré escribiendo en este reto 😃.
¡Espero que os haya gustado!
Portada del post: Imagen de ptra en Pixabay
Hola M.A!! Por supuesto que nos ha gustado, no podía ser menos y en espera de las dos nuevas entregas 😉. Besitos.
ResponderEliminar¡Hola, Isabel! Ya veremos cómo acaba esta historia... je, je, je.
Eliminar¡Gracias por comentar! Un abrazo :)
Genial relato me encanta como utilizas el color azul. Te mando un beso
ResponderEliminar¡Muchas gracias, J. P.! Me alegra que te haya gustado el relato.
EliminarUn abrazo :)
Gracias por compartir tus letras.
ResponderEliminarGracias a ti por comentar.
EliminarMe gusta todo lo que haces. No sé si será bueno o malo, pero siempre me dejas reflexiva. UN ABRAZO.
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Keren! Este relato es una precuela y está en el centro de la serie para explicar lo que ocurrió en el pasado. Los temas sobre venganza o injusticia suelen venir con moraleja, veremos cómo acaba esta historia je, je, je.
EliminarUn abrazo :)
¡Hola! Has arriesgado un género nada fácil, y lo has enfocado muy bien. Bien trabajado el escenario, igualmente los personajes están logradísimos, te felicito. Me ha gustado, quedo con ganas de leer el próximo. ¡Hasta pronto!
ResponderEliminar¡Hola! Por eso me gustan los retos de escritura, porque son una buena oportunidad y un gran aliciente para practicar y arriesgar en las ideas como con más soltura je, je, je. Me alegra mucho que te haya gustado el relato.
EliminarUn abrazo :)
Qué bueno, Auxi. Cada vez dejas la intriga más alta.
ResponderEliminarMucho azul y mucha emoción en el relato, aunque el desierto y la incertidumbre me hicieron sudar. XD
Estoy encantao de que esta serie la escribas completa en el VadeReto. Es un valor añadido para el reto acervolense que te inspire estas historias.
Gracias por tus regalos escritos.
Un abrazo.
¡Hola! Me alegra mucho que te guste el relato :). Fue complicado meter el color azul en una historia tipo western, pero me lo propuse porque me hace mucha ilusión continuar con esta saga. Veremos como sigue en los próximos VadeRetos je, je, je.
EliminarUn abrazo :)
¡Hola, M.A.! Desde luego que ese Peter el Tuerto es un malandrín de tomo y lomo al que mejor no dar la espalda como ha comprobado Billy. Un estupendo western el que nos ofreces en el que ese color azul se presenta como premonitorio del fatal desenlace para Billy, postrado finalmente y con todo el inmenso azul celeste rodeándolo. Un abrazo!
ResponderEliminar¡Hola, David! Gracias por tus palabras.
EliminarPues sí que tenía motivos Billy para perseguir a Peter en la otra vida. Me gusta cómo defines el color azul como premonición del desenlace. En sus últimos momentos, Billy tuvo que soportar lo que más odia.
Un abrazo :)