Relato: Pirata por accidente | Especial Halloween 2019
Imagen de Felix Lichtenfeld en Pixabay.
Yo he elegido:
- Personaje: Un pirata cojo con una pierna que tiene vida propia.
- Escenario: Foto #2. Un circo itinerante donde se exhiben monstruos venidos de los más increíbles lugares.
- Frase: Con lo bien que estaba yo...
Y esta es la historia que se me ha ocurrido, enfocada al género de terror:
PIRATA POR ACCIDENTE
—¡Con lo bien que estaba yo en altamar…! —exclamaba al público, una vez más, como primera frase de mi espectáculo, que siempre comenzaba después de que los del circo exhibieran al blemia. Mis ropajes eran los propios de un pirata. Incluso llevaba un parche.
Me había unido a un circo itinerante en el que se mostraban monstruos exuberantes venidos de los más increíbles lugares y así me veían a mí, como a un monstruo. Resulta que perdí una de mis piernas en un trágico accidente laboral y, más adelante, una desafortunada maldición hizo que cobrase vida la única pierna que me quedaba. No, no soy una persona afortunada en cuanto a piernas se refiere… ¿Quién me mandaba a mí tocar aquel objeto encantado tras las insistentes advertencias?
Me quedé sin trabajo y me vi obligado a ganarme la vida en este ridículo espectáculo en el que, apenas había pronunciado mi frase, mi pierna comenzaba a dar brincos por sí misma, a arrastrarme (después de dejarme caer al suelo) y a obligarme a reproducir una ridícula danza.
Las risotadas siempre resonaban hasta en el último rincón de la carpa.
—¡Mirad al pirata! Ja, ja, ja —gritaban los espectadores mientras me señalaban—. ¿Te ha comido la pierna un tiburón? ¡Vuelve brincando a tu barco!
«Pero ya se acabó», pensé. Aquel día decidí que mi número sería diferente. Cuando la pierna se cansó de brincar, tomé un hacha que había escondido por la mañana entre un puñado de atrezo. Me arrastré hacia allí, la empuñé y la levanté. Creyeron que era parte del espectáculo, pero su filo era verdadero. Lo había decidido: iba a cortarme la maldita pierna.
Estaba quieta. Me senté, alcé el hacha con ambas manos y me propicié un fuerte y profundo corte por encima de la rodilla. La pierna se retorció y yo también sentí un dolor espantoso. Una vez que empecé, ya no paré hasta que la hube desprendido de mi cuerpo. La pierna continuó moviéndose por sí sola, como el rabo cortado de una lagartija, hasta que, finalmente quedó inmóvil.
El público enmudeció. Yo reía en un estado de semiinconsciencia mientras me desangraba. Sentía alivio y dolor al mismo tiempo. Entonces, los asistentes señalaron hacia mí con la perplejidad y el espanto dibujados en sus rostros. Miré hacia el lugar exacto donde apuntaban sus dedos. Mi mano, que todavía sostenía el hacha, se alzaba por sí sola sobre mi propia cabeza.
FIN
Espero que os haya gustado y...
¡Feliz Halloween!
Buenos días, María.
ResponderEliminarEn primer lugar, muchísimas gracias por participar en mi VadeReto dentro de mi rincón literario, que ahora es también el tuyo. Siéntete libre de entrar y salir cuando gustes. Sus puertas estarán siempre abiertas para ti.
Es curioso que has interpretado, incluso mejor que yo, a ese "pirata cojo con pierna parlanchina". Si es cojo solo tiene una pierna y esta es la que habla. jajaja Yo le dejé las dos, porque me daba pena. Bastante tenía con su desgracia.
Aunque lo has vestido como relato de terror, no deja de ser una maravillosa historia fantástica y dramática. El pobre hombre no tiene más desgracias porque no lo ha mirado Medussa.
Es un relato muy original, interesante, intrigante y, por supuesto, terrorífico. Además, con un final de los que a mí me gustan: Inesperado y en suspenso.
Me ha encantado la versión que has hecho de mi propuesta.
Muchas gracias de nuevo por tu participación y espero verte por allí en futuros retos. No te pierdas el que voy a hacer para el próximo mes. Os reservo una interesante y jugosa sorpresa.
Saludos
Muchas gracias. La verdad es que has planteado un reto muy original y tus propuestas me inspiraron mucho. Sin saberlo escogí la misma combinación que tú jejeje y me ha parecido muy interesante leer cómo, con los mismos elementos, nos han quedado dos historias tan diferentes.
EliminarMe alegra mucho que te haya gustado el relato.
¡Un abrazo! :)
Una maravilla de relato Auxi. Me quedo asombrado ante tu capacidad para incluir lo macabro y grotesco contando con elementos que a priori formarían parte de un relato humorístico. Y esos finales a los que nos tienes acostumbrados... ¡Como me gustan! XD
ResponderEliminar¡Me alegra mucho que te haya gustado el relato! Como te comentaba, me pasa como a ti, que a la hora de escribir me puede el terror jejeje.
EliminarY quedan interesantes las ideas sacadas de elementos tan dispares.
Un abrazo :)
¡¡Hola M.A!! Bueno, a mí que siempre me dan risa las historias de miedo, esta va más allá y el último regusto que queda en leer el relato es un auténtico escalofrío, pobre pirata, todo un drama lo que vive con su cuerpo. Una historia excelente para Halloween, pero no pienso disfrazarme de pirata en ningún Halloween, por si acaso, mis miembros empiezan a volverse locos y acaban conmigo, ja, ja. Besitos y feliz día.
ResponderEliminarJajaja, verdad, no sería muy buena idea disfrazarse de un pirata como este en Halloween. Qué bien que te ha gustado el relato.
Eliminar¡Un abrazo! :)
¡Me encantó, María! Estas historias son mi debilidad desde los tiempos de la serie La Dimensión Desconocida. Nos presentas un ser perturbado y perturbador que hastiado de su maldición se amputa esa única pierna, siguiendo aquella sentencia bíblica que decía "si tus ojos te hacen pecar, ¡arráncatelos!"
ResponderEliminarPero es que el final es absolutamente redondo, ese espanto de la mano revolviéndose contra él avanzando el triste final de su historia.
Fantástico relato con un excelente cocinado de los ingredientes más apetitosos del género. Un abrazo!!
¡Gracias, David! El personaje termina ya por tomar una decisión extrema con tal de liberarse para finalmente toparse con otra sorpresa. Te agradezco tus palabras y me alegra mucho que te haya gustado esta historia.
Eliminar¡Un abrazo! :)
Hola. Pues sí, a mí por lo menos me ha gustado; y mucho. Qué bien jugadas las cartas, la fusión de elementos me ha parecido perfecta. Genial la idea que les anexiona, un drama súper bien edificado. Y, qué decirte del final; todos tus finales son intocables, buenos a tope, fuera de lo convencional y del todo coherentes. Con total sinceridad te felicito, M.A. Feliz Halloween. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras y por apreciar el relato. Me alegra mucho que te haya gustado. Seguiré tu consejo sobre Minatura ;)
EliminarUn abrazo.
Hola
ResponderEliminarMe ha encantado, no tenía muchas esperanzas por lo corto que iba a ser, pero en definitiva me has sorprendido.
Pobre hombre :/
¡Hola! Me alegra mucho que te haya gustado el relato :)
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarYa había leído relatos tuyos y me gusta bastante como escribes. Me has sorprendida con la historia y sobre todo el toque inesperado final: alucinante... Me pareció una buena iniciativa el reto de escritura, el resultado ha sido genial.
¡Un besado!
¡Hola, Clara! Muchas gracias por tus palabras. Me alegra mucho que te haya gustado este relato y hayas leído otros. Qué ilusión :)
Eliminar¡Un abrazo!
Uy pobre pirata, buen relato genial para estas fechas.
ResponderEliminarEscrito especialmente para Halloween jejeje. Gracias :)
EliminarNo resulta nada fácil convivir sin una pierna y para colmo de males, la otra endemoniada y con vida propia, por lo que el pobre pirata «circense» tuvo que armarse de valor y acabar de un hachazo certero, con tamaña desgracia.
ResponderEliminarMuy bueno ese giro final, compañera, donde la realidad supera la ficción que suponía el público, lo que le da ese plus de terror a la historia.
Un abrazo :)
Gracias, Estrella. Este pobre "pirata" va de mal en peor... Me alegra que te haya gustado el relato y el desenlace.
EliminarUn abrazo :)
Me tuvo en vilo hasta el final que gran giro y que "mala pata!!" Ja ja ja
ResponderEliminarun saludo compa!
erremixx.blogspot.com
Pues sí, mala pata, nunca mejor dicho jejeje.
EliminarMe alegra que te haya gustado el relato.
¡Un saludo! :)